Con el asesinato ayer del adolescente Juan Emilio Bautista Paniagua, se 16 años, se elevan a diez los homicidios de menores de edad ocurridos durante las primeras tres semanas de este año, lo que pone en evidencia la participación cada vez más creciente de estos en hechos violentos y las constantes agresiones y abusos de que son objetos niños, niñas y adolescentes en el país.
El jovencito Bautista Paniagua fue muerto a balazos por cuatro jóvenes, dos de ellos también menores de edad, según los reportes, presuntamente molestos por la relación sentimental que la víctima mantenía con una adolescente del barrio San Miguel, del sector Los Manguitos, del Distrito Nacional, donde ocurrió el crimen. La Policía dijo que sus agentes persiguen a cuatro jóvenes sólo identificados como “Blady”, “Monchito”, “Wilkin” y “El Calvo”.
Explican crimen
Vecinos del barrio San Miguel dijeron a la Policía que el crimen ocurrió porque Bautista Paniagua tenía una relación sentimental con una joven del sector, lo que habría molestado a sus agresores. La Policía Científica levantó cuatro casquillos calibre 9 milímetros en la escena.
Desde que se inició el año 2014, diez menores, de entre 13 y 17 años, han sido muertos en forma violenta, entre los que destacan la decapitación de la jovencita Yanell Pérez, de 13 años, fue asesinada por un hombre con quien, según las autoridades, había tenido una relación con ella. El hecho ocurrió en Mata de Palma, de El Seibo, cuando la menor se dirigía a la escuela.
Entre las víctimas figuran Marco Antonio Mendoza, de 17 años, muerto a balazos por una patrulla policial el 5 de enero en Los Guarícanos. Dos jóvenes de 20 y 19 años, que acompañaban a Mendoza fueron ultimados por las patrullas que alegaron que los muchachos pertenecían a una banda de delincuentes y agredieron a tiros a los agentes. En Pueblo Nuevo, San Cristóbal, fue asesinado el menor Ezequiel Pérez, y en Villa Consuelo, Brayan A. Guzmán, de 17 años.
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