04 enero 2014

Soy una mujer de trabajo

Santo Domingo.-Banca Solidaria cambió por completo su vida. Antes trabajadora sexual, ahora microempresaria en la preparación de comida. Inició con 5,000 pesos. Buena pagadora, su negocio prospera. Seis meses después le renovaron el crédito por 25,000 pesos.

Belkis Jiménez –le dicen Mildred- está muy orgullosa de su sazón, pero más aún de su nueva condición. Su hijo, predicador de la palabra de Dios, está feliz. Lo ha recibido como una bendición.

En junio del 2013, Banca Solidaria lanzó un programa para ofrecer a las trabajadoras sexuales que lo deseen la oportunidad de reconvertir sus vidas.

Esta es la historia de Belkis y Banca Solidaria.

Jacqueline Montero, regidora, ex trabajadora sexual, directora del Movimiento Mujeres Unidas (MODEMU) que surgió en 1997 para proteger la salud y derechos de las trabajadoras sexuales se acercó a Banca Solidaria para buscar apoyo que permitiera a estas mujeres llevar una vida más digna.

Se impartieron charlas de promoción y educación financiera a unas 113 trabajadoras sexuales. 66 de ellas recibieron préstamos por un valor total de 476,000 pesos.

Belkis fue de las primeras y más entusiastas. Como ya dijimos, tomó 5,000 pesos para iniciar. A ver. Para probar. 

Ha sido tan buena pagadora, tan buena administradora de su negocito, que los técnicos de Banca Solidaria recomendaron, al evaluar el crecimiento de sus ventas y su capacidad de pago, que se le aprobaran 25,000 pesos tan pronto saldó su préstamo inicial.

"Te digo algo, confiesa Belkis, me siento ser una empresaria. Cuando voy y compro sé que la gente no me está mirando de otra forma, sino que me están viendo como una mujer de trabajo que se levanta a las 7 de la mañana y son las 10 de la noche y todavía sigue en la batalla".

El gobierno de Danilo Medina se siente reconfortado de que mujeres como Belkis Jiménez aprovechen las oportunidades y facilidades que ofrecen sus programas como Banca Solidaria y que hayan podido cambiar sus vidas. Cuidar, cambiar y enriquecer la vida de dominicanos y dominicanas es nuestra razón de ser y de gobernar.

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